Conocida En Todas Partes
Por donde quiera que fuera Anna, iba saludando a gente. Pero no gente cualquiera, gente de mucho caché de Nueva York, gente con mucho dinero. Todo el mundo la conocía aunque nadie sabía nada de ella ni de su vida. Cuando decidió mudarse al nuevo hotel del soho, incluso ya conocía de antes a todo el personal y por eso cuando fue a pagar por su suit, no tuvo que mostrar ninguna tarjeta de crédito. Pago todo en efectivo.

Conocida En Todas Partes
Publicidad