Abriendo Los Ojos
Estaba realmente furioso con ella y también decepcionado. No podía entender que alguien como Anna, simpática, dulce, con una cara angelical, siempre atenta a los demás, fuera una grandísima estafadora. Pero ya se había dado cuenta, ya era la segunda vez que se lo hacía y estaba en esa situación porque era una verdadera delincuente. Ya nunca más confiaría en ella porque ya tenía claro quién era Anna Delvey.

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